Diario Lunar

Esta semana empecé terapia. Soy de las pocas personas en mi grupo de amigos y familiar que nunca hizo terapia y ya me gustaba empezar a identificarme así, fuerte supongo. Recuerdo que una vez siendo muy chica le dije a mi mamá en la cocina de mi antigua casa de San Telmo que quería ir al psicólogo. Por qué me preguntó y le dije que quería ir porque todos mis amigos iban. Claramente nunca me llevó. Las personas que saben que comencé me preguntan que me pareció ella. La verdad no sé, existe el amor a primera vista con un terapeuta? La pregunta no debería ser como me sentí?  Los vínculos se construyen . Bienvenida Vivi a mi vida. Algo que me llamó la atención fue que me dijo que tengo que aprender a pedir ayuda. Y a quién pedírsela. Lo bueno es que está a una cuadra del Barrio Chino.

Desde que tengo memoria recuerdo tener lunares en todo el cuerpo. Solía hacer chistes diciendo que no me hice tatuajes porque tengo mis lunares. Ahora también tengo mis cicatrices. Tengo 29 años. A los 27 años me diagnosticaron con melanoma. A los 27, en la edad maldita del rock . No sé en que serie o película escuché que no se empieza a vivir hasta los 27, que cierto es. Quise empezar este testimonio porque no encontré algo similar en el momento que podría haber sido de gran ayuda para mi. Desearía haber leído esta afirmación por alguien que pasó por algo similar:  todo va a estar bien, porque así tiene que ser. Un verano descubrí que mi lunar en el muslo estaba raro. Era un lunar de carne que picaba, a veces se ponía   duro y dolía. Saqué turno con la dermatóloga para después de las vacaciones y me fui a la costa. En el peaje me dieron un folleto sobre el cáncer de piel, como todos los años que hacen campaña para concientizar que el sol te toma a vos...